Se conmemora el 110 aniversario de su natalicio.
La pluma de Leopoldo Peniche Vallado abarcó todas las disciplinas artísticas y la importancia de ser un hombre de su tiempo interesado en el acontecer nacional y mundial, con el anhelo de explicar su entorno geográfico, ideológico y humano, se destacó este día en el marco del 110 aniversario de su natalicio.
El titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Roger Metri Duarte, los hijos del homenajeado, Roldán y Hugo Peniche Barrera, así como invitados especiales, se reunieron para honrar y recordar las principales aportaciones del escritor en la plaza que lleva su nombre, situada en el Centro Estatal de Bellas Artes (CEBA).
El jefe del Departamento de Literatura y Promoción Editorial de la Sedeculta, Jorge Cortés Ancona, resaltó que la vida del personaje estuvo dedicada a trabajos que repercutieron en la sociedad como apoyo, guía, enseñanza, interpretación o consejo.
“Tuvo un trayecto ejemplar como funcionario que se vio complementado con su labor periodística y, sobre todo, de escritor”, acentuó.
Cortés Ancona dijo que el tributado se asemeja a los liberales de nuestro siglo XIX o a los revolucionarios de la primera mitad del siglo XX, esas generaciones de intelectuales mexicanos que pretendieron forjar patria desde todos los ámbitos en los que se desenvolvieron, lo mismo la actividad política o social, que la enseñanza o el comentario.
“Desempeñó un papel crítico, ya sea dispuesto a decir verdades a los hombres del poder, o bien, a expresarse de modo cauteloso ante los riesgos de una crítica que pudiera mal encaminarse en momentos de conflicto o coyuntura”, resaltó.
Agregó que como dramaturgo empleó recursos propios de la leyenda, humorismo vernáculo e incluso de la ciencia-ficción en una obra póstuma, siempre con objetivos claros de intencionalidad social.
El orador coincidió con las palabras de Peniche Vallado en que lo más importante de un creador es que antes de recibir galardones es que su obra se divulgue, se lea, se represente o interprete.
“Tenemos el deber generacional de mantener viva su memoria a través- y ante todo- de la difusión y conocimiento, que es una de las expresiones más significativas del Yucatán del siglo XX”, concluyó.
En el transcurso del evento, el Trío Trovanova dirigido por David Solís intervino con el bambuco “Inútil fuga” y el bolero “Embrujo”, ambos de Humberto Lara y Lara.
En tanto, Luis Santos, Beatriz Rosado y Jorge Chablé Mendoza, discípulos de teatro de la Casa de la Cultura del Mayab, que lleva el nombre del también periodista, dieron vida a En Mérida y en una casa.
Posteriormente, Metri Duarte encabezó la ofrenda floral y guardia de honor ante el busto del ilustre yucateco, junto con familiares e invitados presentes.
Estuvieron los directores de la dependencia estatal, de Desarrollo Cultural y Artístico, Alejandro Pérez López; de Promoción y Difusión Cultural, Germán Rodríguez Jiménez; y de Asuntos y Servicios Jurídicos, Alejandro Moguel Espejo.
Además de las dirigentes de la Escuela de Escritores que hace honor al referido creador, Ena Evia Ricalde y de los Centros Estatal de Bellas Artes (CEBA), y de Educación Artística “Ermilo Abreu Gómez” (Cedart), Rita Castro Gamboa y Yolanda Tamayo Campos, respectivamente.
